Semana del 21 al 27 de septiembre del 2002


Antonio Gala pregunta: ¿Quien es el dueño de la herida?

Dr. Oswaldo Paz y Miño Jaramillo

"¿Quién es el dueño de una carta: el remitente, o el destinatario? Acaso el correo, en su trayecto al menos: ¿Quién es el dueño de la herida: el que la causa, o el que la padece? ¿No son caras de una misma moneda? O quizá el dueño es el sentimiento que les clava su dardo. Quién ama, quién es amado; y el amor: ese arquero que los llaga a ambos, ese puente levadizo en que se encuentran y se desencuentran. El dueño de la herida es el verdugo y es la víctima; es el idólatra y es su ídolo; pero, sobre todo, aquello que los vincula o los enfrenta, sea cual sea su nombre. Porque hay amores que no saben el suyo verdadero.".La sola lectura del párrafo anterior nos revela el Antonio Gala clásico.

El amor se desborda con todas sus incógnitas, en cada una de las páginas de esta la más reciente producción, de un escritor español inigualable. No habré de ocultar, como no lo he hecho antes, que desde la primera ocasión en que ustedes y nosotros mantenemos un dialogo semanal, desde los balcones que nos ofrece esta Revista Cultural Artes, que, las letras de Antonio Gala son las que más conmueven mi espíritu y mi ánimo, y se adentran en mis propias letras y mis tintas y pensamiento.

Por comentarios de ustedes, a los nuestros, que siempre recibimos con el mejor ánimo y gratitud, sabemos que, en más de uno de nuestros semanales contertulios, hemos despertado la curiosidad de husmear un poco en las cuartillas de las obras de Antonio Gala. Para nuestro deleite, y de muchos, las librerías grandes y pequeñas, todas ellas que arriesgan por la cultura, han abierto también sus anaqueles para otorgar espacio propio, particular y único a los trazados bellos, de este escritor portentoso.

Es Antonio Gala de aquellos que encandilan con la sutileza de sus letras, desde los Títulos mismos de sus obras. Cada membrete con el que identifica sus libros, es arte puro. He aquí una muestra: 'Sonetos de la Zubía' (poesía) - 'Testamento Andaluz' (Poemas de amor) - 'Enemigo Intimo'(Poesía)-'Los Verdes Campos del Edén' ( Teatro) - 'El Manuscrito Carmesí' ( Novela Premio Planeta 1990) - 'La Pasión Turca' (Novela) - 'El Imposible Olvido'(Novela) - 'Mas allá del Jardín' (Novela) - 'Los Invitados al Jardín' (Relatos de Amor) y 'El Dueño de la Herida', también de relatos de amor.Treinta y ochos testimonios de amor, burilados a mano, tejidos desde el alma, la soledad y el silencio.

Experiencias propias o ajenas que el escritor de Córdoba, que ha cumplido ya sesenta y siete años nos acerca. No se requiere empezar desde el principio, a lo mejor bien vale desde el final. Cada historia es pedazo de vida y de muerte, que es lo mismo. Un trocito de alguien que causó una herida o ha sufrido alguna. Porque el amor dicho, como lo dice Gala, y como es en verdad, nace y muere por los tajos que los hombres y las mujeres le hacen al corazón ajeno. No es necesario, y no siempre sucede, claro, que el causante de la herida se entere, que ha rasgado la piel del otro. Es que en esto de los amores y de las pasiones, sucede que los amores que más se ama son aquellos que no se dicen, porque no se puede o porque no se quiere. Porque esa es facultad del que ama. Por ello estos amores que se hacen de afuera para adentro, y no de adentro para afuera, son de los que más duelen. De idas y venidas. De la libertad que nos viene de amar y de la prisión que nos encuentra por lo mismo, o sea amando.

"Tocaron la puerta. Lorenzo se acerco a ella despacio. Miro el reloj de nuevo. Ya era de madrugada. Supo quien llamaba. Abrió. Sidonia lo miraba no sonriendo, no alegre. Sidonia lo miraba con una dolorosa intensidad. Ninguno de los dos hizo ningún movimiento. Ninguno decía ni una sola palabra. Lorenzo se retiró y la dejó pasar. Cerró la puerta detrás de ella. Sidonia se acercó lentamente. ¿Dónde tenía las manos? Lorenzo no las vió. Sintió que apoyaba su cuerpo contra el de él, y que su cabeza buscaba su hombro derecho. En ese momento él subió los brazos y apretó aquel cuerpo reencontrado contra el suyo, reencontrado también.- Bienvenida-le susurró al oído.- Bienhallado-dijo-ella."

.'El Dueño de la Herida' tal y como los 'Invitados al Jardín', se adentra en los resquicios del amor y del sexo. De la atracción que se da entre los del sexo opuesto y también de la otra, de la que se da entre aquellos que prefieren a los de su mismo sexo. Que el amor, se esparce por el Universo y no es cuestión de géneros, sino de amor y de preferencias que han de ser respetadas y respetables. Romanticismo, violencia, carne, dolor, clímax y ternura. Todo está envuelto en esta colección de relatos, que en dos ediciones ha superado ya los doscientos quince mil ejemplares. Editorial Planeta ya los ha ubicado en Ecuador.

Oswaldo Obregón, un Colombiano amigo de esta tierra, tanto que hace cultura para ella, desde su alto cargo en esa Editora ha importado ya algunos ejemplares de esos miles y los ha distribuido en las librerías del país.

"Ernesto, mientras se desnudaba la miró de una forma que ella entendía bien.-¿Estás de veras muy cansada?-No sé. Creo que sí. Por lo del río de esta mañana. Hay que andar un trecho.-Lo que estás es más linda que nunca. Se te ha subido todo el sol a la cara.. Y ya es tu santo.Se acercó, la beso. Le puso entre las manos un estuche alargado. Era un collar. Unos brillantes montados de una forma lucida, que ya no se llevaba. Una buena joya de familia. Qué raro que no la hubiese descubierto antes..-Te lo agradezco tanto. Siempre estas en todo. Gracias.-Estrénalo mañana.Estaban un cuerpo contra el otro. Él le dejó caer los tirantes del camisón" Pág. 197.

Nunca será el amor un tema concluido. Jamás las pasiones dejarán su actitud implacable. El sexo tendrá vigencia en el ser humano mientras este como especie exista y moverá al cielo y a la tierra, como hasta ahora lo ha hecho, tanto, que de él hasta se ha querido inventar y sostener un pecado de origen a la raza humana. Si el sexo no va a la persona, la persona ha de ir al sexo. Es la piel que demanda. Es lo natural. Los gustos hacen la diferencia.

."Diego, por su parte, ignoró siempre si Raúl lo había reconocido, o sí a lo largo de los primeros miércoles, dedujo su profesión. Un día sacó la conclusión de que el chico pensaba que era catedrático de Bellas Artes: otro, que era grabador o escenográfo; y hubo tardes en que le pareció que pensaba que era arquitecto, o quizá pintor hiperralista. Por supuesto, él tampoco sabía gran cosa de Raúl. En las primeras citas eso le divertía; era como jugar con alguien muy hermoso a la gallina ciega: se podía tocar, se podía hablar, pero era imposible saber del todo la verdad, tan sólo adivinarla, o mejor imaginar lo que no podía ser adivinado" Pág. 157.

Quien no ha sido herido por el amor, no ha vivido, piensa Antonio Gala, que confesó que cuando su editora le dijo que iban a poner a la venta en primera edición 100.000 ejemplares de la obra comentada, el pasado 18 de marzo, pensó: "se me hundía la casa, porque creí que íbamos a estar todo el año vendiendo".

Los seguidores de Antonio Gala y los que no lo son, habremos de encontrar en el dos elementos que colaboran en su vida y en su arte y que son carne de su carne: la soledad y el silencio; ambos conviven con él, desde la intención particular de su personalidad. Y, sin embargo, de esas soledades y silencios se aprecian amores totales y vivencias hirientes, desde las dos veredas, de la del amante y de la del amado. Este libro es una marca en la piel del escritor para la epidermis y el alma del lector, que según Gala es último colaborador de sus trabajos. Hay mucho de autobiográfico en el manuscrito, y una porción igual en las heridas. Dice: "Se aprende a acumular dolores, pero se olvidan los momentos felices que se viven".

¿En que orilla se ubica usted lector? Alguien posee su herida o por el contrario usted sangra y no lo sabe o no lo cuenta. Todos tenemos algo de víctima y de victimario. "El Dueño de la Herida" es un libro que puede ubicarnos en el papel que nos corresponde.

La Hora 2002 - Quito - Ecuador