De amor y soledad / Biblioteca
18 de Abril de 2010
OSWALDO PAZ Y MIÑO J.
La literatura adherida a la vida. Un solitario cincuentón, Julius Winsome, dueño de una maravillosa biblioteca, enamorado de la lectura, admirador hasta el tuétano de Shakespeare, de un día para otro ha perdido a su más fiel compañero, a su mejor y más discreto amigo, al leal ser que con él velaba, literalmente, los libros y las armas.
La muerte de Hobbes, el perro con nombre de filósofo, asesinado a sangre fría, tiroteado a boca de jarro por un cazador desalmado, desatará en los lectores una serie de atropellados y confusos sentimientos que viajarán raudos por entre los matices del amor al odio y del odio al amor en cuestión de minutos.
Será un recorrido a latidos cortos o latidos largos por los 240 folios que arman la estupenda novela cuya portada mostramos, que lleva la firma del autor irlandés Gerard Donovan y que publica con finura la editorial Tusquets.
Literatura de quilates es El inventor de palabras, novela adquirida en Mr. Books, conste lo dicho, para que la información os sea completa. Escogido fue el texto entre otros de reciente arribo, con el ánimo de complacer vuestras apetencias bibliófilas.
Sabemos de propia experiencia que es grato, hasta emocionante para los que gastamos suela y algo más por entre los corredores de las librerías de oficio, dar de cuando en cuando con una que se haya importado de otros mares, libros de exóticas editoriales y extravagantes autores. Este es el caso de hoy. Lectores y escritores somos almas errantes. Por cuenta propia y en soledad se cumplen nuestras tareas.
‘El inventor de palabras’ es un autor muy especial, sus líneas de expresión singular son palabras escritas desde el gran vacío, desde la ausencia infinita, desde la distancia inconmensurable que separa a un ser que sobrevive la pérdida de otro ser que partió en manos de la muerte, desde el amor y el dolor extremos, desde la pasión y la perversidad, desde la mirilla de un fusil vengador, desde la revancha siempre insatisfecha.
Letras que nos ponen cara a cara con la crueldad humana, sin tapujos. Palabras que arden, que penetran, que hieren, que rompen la piel y nunca mejor dicho. El bosque plagado de árboles, de letras, de signos, de raras sentencias es el lugar propicio para armar y disparar frases y balas. Maldiciones y verdades.
El inventor de palabras le pone tinta de sangre al pensamiento de Marcel Proust que en El tiempo recobrado dice : “El estilo para el escritor como el color para el pintor no es una cuestión de técnica, sino de visión”, este párrafo lo comprueba: “Me estaban separando de los libros de mi padre a balazos. Cada año habrá más cazadores, mejor equipados, que, no dispuestos a volver a casa con las manos vacías, se adentraban más en las fincas privadas. Y si no podía leer con todos esos tiros, ¿para qué tener libros?” (Pág. 188).
No sea usted presa fácil, entre leer y no leer puede estar la diferencia entre morir y morir para siempre.
Biografía
Gerard Donovan
Nació en 1959 en Wexford (Irlanda) y ha vivido en Alemania y en Nueva York. En la actualidad imparte clases en el Southampton College de la Universidad de Long Island. Autor de libros de poesía, género en el que ha obtenido diversos galardones. Su primera novela fue El telescopio de Schopenhauer (Andanzas 566), ganadora del premio Kerry Group Irish Fiction Award 2004 y finalista, en España, del Premio Llibreter 2005, lo cual le reveló como uno de los narradores más prometedores de la nueva literatura irlandesa.
Además de El telescopio de Schopenhauer, novela con la que Donovan se acercó al escenario de los conflictos bélicos en Europa del Este, Tusquets Editores ha publicado El doctor Salt (Andanzas 675), en torno a los peligros de la búsqueda de la identidad.
