ARTES / CULTURADilema de dilemas / Biblioteca
13 de Diciembre de 2009
Si mi biblioteca ardiera esta noche.
RESEÑA ENSAYÍSTICA DR. OSWALDO PAZ Y MIÑO JARAMILLO
Seguro estoy que el título del libro que hoy presentamos os habrá sobrecogido. A mí así me ha sucedido. El pensamiento me ha llevado a la noche del “donoso escrutinio”. Cervantes inmortalizó al dolor así:
“Aquella noche quemó y abrasó el ama cuántos libros había en el corral y en toda la casa, y tales debieron de arder que merecían guardarse en perpetuos archivos; mas no lo permitió su suerte y la pereza del escrutiñador, y así se cumplió el refrán en ellos de que pagan a las veces justos por pecadores”.
Quemar bibliotecas ha sido siempre tarea de censores, de traidores, de fanáticos, de totalitaristas infames, de viles seres humanos a los que la libertad de expresión y el conocimiento resultaron una amenaza.
Todos los dictadores o aprendices de tales sintieron en su turno, en la realidad o en la ficción, pánico ante los libros, ante las ideas contrarias, fobia e inseguridad ante la oposición.
Se sostuvieron en el aire, es decir, en la razón de la fuerza, no en la fuerza de la razón y sí en la expresión del chantaje, en la práctica del soborno.
Se sostuvieron en el aire, es decir, en la razón de la fuerza, no en la fuerza de la razón y sí en la expresión del chantaje, en la práctica del soborno.
Se sabe, siempre repartieron cuotas de poder entre los miserables de los miserables, que en concreto más temprano que tarde transformaron tal generosidad en cuchara, utensilio que no sólo les sirvió para engordar, sino para complotar inclusive contra las enseñanzas de sus ancestros.
Si la biblioteca de cualquiera de vosotros ardiera una noche cualquiera ¿qué salvarías de poder hacerlo? Dilema de dilemas. Y luego, de lo consumado y consumido ¿qué repondrías, de ser factible? ¿Las reposiciones, serían tan igual de queridas como las desapariciones? ¿Quién os devolvería vuestras horas de lectura, vuestros signos, vuestras huellas, vuestras lágrimas, vuestras vidas fragmentadas, en las páginas quemadas? ¿Sería volver a empezar?
Lectores que sois, de ‘hueso colorado’ -dicen los taurinos- ¿os reconocéis adictos? ¿Es para vosotros un vicio o una virtud, el transitar la vida entre caligrafías ajenas para intentar propias? Y si legalmente aceptada está la droga ¿hasta dónde van vuestras dependencias? ¿Cabe un examen de conciencia? ¿Es leer un ejercicio de libertad, cuando no se puede vivir sin leer?
Todas estas preguntas y otras estallan, en el delicioso seguimiento del tomo que sin pestañear os recomiendo.
Una gran obra, que recoge el arte de ensayar bien, léase de pensar con genialidad, por tanto con profundidad y sapiencia, que ha legado el escritor inglés Aldous Huxley para la humanidad y que ha publicado la casa Edhasa en primera edición en marzo 2009.
Cuatrocientas cuarenta y ocho páginas que en, caso de incendio en una biblioteca, habría que salvar. La selección, el prólogo y la traducción llevan la firma de Matías Serra Bradford. Sugerencias urgentes desde la libertad de expresión patente de esta casa, quisiéramos comentar todos los que constan y otros de los que traeremos noticias, pero es imposible, tiempo y espacio no lo permiten: El catolicismo explicado a las ovejas, de Juan Eslava Galán; Arqueros del Rey, de Bernard Cornwell; Breve historia del Temple, de José Luis Corral; Motn en la Bounty, de John Boyne.
BiografíaAldous Leonard HuxleyFue un escritor (1894-1963) anarquista inglés que emigró a los Estados Unidos. Miembro de la reconocida familia de intelectuales Huxley. Conocido por sus novelas y su gran abanico de ensayos publicó, también, relatos cortos, poesía, libros de viaje e historias para películas y guiones. Mediante sus novelas y ensayos ejerció como crítico de los roles sociales, las normas y los ideales. Se interesó, asimismo, por los temas espirituales, como la parasicología y la filosofía mística, acerca de los cuales escribió varios libros. Al final de su vida Huxley era considerado como un líder del pensamiento moderno.
