DE AQUI EN ADELANTE DEDICATE A LEER

DE AQUI EN ADELANTE DEDICATE A LEER
MIENTRAS ESCRIBIMOS PARA TI

ESTE LUGAR ES UNA ESTANCIA DEDICADA A LA SOLEDAD Y AL PENSAMIENTO

ESTE LUGAR ES UNA ESTANCIA DEDICADA A LA SOLEDAD Y AL PENSAMIENTO
PARA VER LA VERDADERA LUZ, HAY QUE MORIR PRIMERO.

NO LE DES MÁS VUELTAS ESTE BLOG ES UN:

NO LE DES MÁS VUELTAS ESTE BLOG  ES UN:
Y TODO LO QUE CONSTA ES LEGIBLE TENDRÀS QUE USAR LOS SEIS SENTIDOS.

LA LECTURA ES UN PLACER. DISFRUTALO, TIENE QUE SER A SOLAS.

LA LECTURA ES UN PLACER. DISFRUTALO, TIENE QUE SER A SOLAS.
ES "LA VITRINA DE LOS LIBROS Y AUTORES"

miércoles, 24 de septiembre de 2008

El cabello de Beethoven- La reliquia mágica de un genio.
DR. OSWALDO PAZ Y MIÑO JARAMILLO
RESEÑA ENSAYISTICA DIARIO LA HORA 2002.

Siempre se agradece vuestra participación desde la posición frente a la página que ahora está en vuestra mano. La propuesta y apuesta para promover la lectura que desde esta Revista Cultural Artes y de esta plancha se presenta a la comunidad cada semana tiene sentido, por el eco que le ponéis a nuestras intenciones. La relación es interactiva, lo sabemos y lo sentimos, por ello ustedes están en la mira y por ello apuntamos a ser diferentes.La obra escogida y degustada que hoy os traemos: EL CABELLO DE BEETHOVEN, de Russell Martin, viene con la marca de un Sello Editorial que antes no se había presentado en esta vitrina de los libros, más sin duda que la adquisición puesta hoy a vuestra consideración avala a nuestro criterio de que se trata de una Editorial de fuste. Nos referimos a Ediciones B.Mirando, cuando esto os escribo, la portada del libro que impregna la cara del Maestro con toda la fortaleza de su genio. Con la profundidad de su irreverente mirada, he de confesaros que tanto como a su maravillosa música, he admirado, y he sentido ejemplo en su dolorosa vida. Su capacidad de lucha. Su fe. Su indomable carácter. Su tenacidad para enfrentar esa misteriosa agonía, que la habrá supuesto escribir La música, en el día a día, en los papeles pautados, que recogían sonidos que él no escuchaba, que intuía. Y he amado también sus obras excelsas, únicas, irrepetibles, cargadas, de toda su interna melancolía: Egmont Overtura. La Quinta, La Novena y La Sexta Sinfonía. Conmovedoras. Dulces. Terribles. Portentosas. Impredecibles, como lo fue su mentor. Éstas por citar unas pocas. Todas y Él. Hacen el todo. Fueron el todo. Serán el todo. Creador de creadores. Un ser humano excepcional. Un especial ser entre los especiales de esos que trascienden a la muerte por la profundidad de su huella Ludwing van Beethoven (Bonn, 16 de diciembre de 1770- Viena, 1827) marcaría un antes y un después en la concepción musical del mundo. Su figura y su obra le han de inquietar a la humanidad por y para siempre. 'EL CABELLO DE BEETHOVEN', un título seductor de un libro que destila historia y música. Una obra que no esconde detalles sobre la vida del compositor alemán y su proyección a través de los siglos. Un trazado ajustado a la personalidad del Maestro. Un manual para interpretar los muchos códigos de comportamiento que envolvieron las páginas vitales de Beethoven. Un provocado encuentro de personajes del que solo surgirán deleites, conocimientos y dones. "En una cálida mañana de diciembre de 1995, un mechón de cabello de Beethoven, conservado durante casi dos siglos en el interior de un guardapelo de vidrio, estaba a punto de convertirse en el centro de atención de una serie de miradas atónitas. A sus propietarios ­Ira Brilliant, un promotor inmobiliario jubilado en Phoenix nacido en Brooklin, y un médico estadounidense de origen mexicano que respondía sorprendente nombre de Che Guevara, se les había unido un grupo de profesionales rebosantes de curiosidad en una de las aulas de la Facultad de Medicina de Arizona, emplazada en Tucson. Entre los presentes se encontraban un antropólogo forense, un medico clínico, una archivera y conservadora, un fotógrafo científico, un secretario encargado de registrar cuanto aconteciera, un notario público, un equipo de reporteros de una televisión local y un equipo de rodaje de la BBC, que de había desplazado ex profeso desde Londres. Había mucho que hacer y eran las 10h30". Pág. 13.Es la historia de una reliquia. Que como todas tienen fondos crípticos. Es una parte de Beethoven, que le fue desprendida y que tiene propia vida. Su cabello, algo de él. Un tesoro histórico que se enfrenta a todas las pruebas, tal y como lo hizo el propio dueño de tales mechas que en vida vieron y no se amilanaron a la grandeza y a la soberbia de Napoleón, que apuntaron su derrota, que volaron al viento y escucharon de Goethe la palabra encarnada en arte, aún cuando las ventanas, del genio solo dejaban paso al silencio permanente.El recorrido DEL CABELLO DE BEETHOVEN, le abre al autor Russell Martin el compás para que construya un libro en el que se arman varios rompecabezas en uno: la reconstrucción histórica y biográfica de la vida del autor de las nueve sinfonías, una investigación minuciosa tras la pista de la reliquia, y otra de naturaleza científica, muy actual que le cuente al mundo el origen de las múltiples y frecuentes dolencias de Beethoven, en especial de su misteriosa sordera."Seguramente, Buena parte. -O más bien casi toda- de la culpa del mal genio de Beethoven la tenía su eterna mala salud. Siendo todavía un adolescente padeció continuas dolencias gastrointestinales y a lo largo de los años siguientes también fue víctima de intensas migrañas y de una sucesión de abscesos e infecciones virulentas, neumonía y bronquitis que hicieron presa en él en una progresión desesperante. "En los tres últimos años he ido perdiendo poco a poco la capacidad auditiva. Por lo visto, el origen del problema está en mi vientre, que como ya sabes funcionaba mal incluso antes de que me marchara de Bonn.Para que te hagas una idea de como es esta extraña sordera, te diré que en el teatro tengo que pegarme a la orquesta para entender lo que dicen los actores y que, en cuanto me alejo un poco, ya no percibo las notas agudas de los instrumentistas ni de las cantantes". Págs. 83 y 84.EL CABELLO DE BEETHOVEN, cual su música comprometió a muchos en la vida y en la muerte. Admiradores y detractores, de los unos y de los otros, sin saberlo siquiera fueron parte de su custodia, de su supervivencia. Hechos y personajes de la historia vinculados al músico eterno, sin saberlo o quererlo algunos, han sido páginas de esta mítica trayectoria. Unos por azar, otros por causalidad, otros por amor y otros por error y por terror, también por odio y dinero compartieron aires con la dicha porción física de Beethoven. En cada capítulo de este libro, está la correspondiente relación. "Anoche me avisaron de que mañana los alemanes tienen previsto hacer una redada en los hogares judíos de Copenhague con el objeto de arrestar a todos los judíos daneses y trasladarlos a los campos de concentración. Saben que mañana es Rosh Hasahanah (Festividad en que celebra el comienzo del Año Nuevo Judío) y que nuestras familias estarán en casa. La situación es muy grave. Tenemos que actuar de inmediato. Ahora debéis abandonar la sinagoga, poneros en contacto con todos los familiares, amigos y vecinos que sepáis que son judíos y contarles lo que os he dicho". Pág. 115.Beethoven era un hombre libre y de buenas costumbres, reconocido y aceptado, por ello su trabajos fueron en beneficio de toda la humanidad. El aporto, al desarrollo en cada ser de las percepciones vitales que envuelven las armonías y los silencios. En La música proyectó su amor por los demás. En ella escribió su alfabeto. En ella radicó su fe. En ella destiló su inmenso dolor. Que eso es la música de sufrir y reír. Lo más noble del arte. La sustancia misma. El camino más directo a la luz del creador. A su mente infinita. A su sensibilidad.Este libro, tiene sus propios símbolos musicales. Material nutritivo para la mente y el espíritu, en cada una de sus trescientas treinta y dos páginas. Tiempo para leer, y, para escuchar a Beethoven, o al Maestro que llene vuestra alma o la música que empate con cada espíritu nunca ha de faltar. Usadlo. Que como a mí pueda ser que nos haga más liviana la carga. Menos duro el trayecto. Más aceptables los reveses. Menos dolorosas las ingratitudes. La lectura y la música nos han de procurar cierta paz, aunque la procesión nos camine por dentro. De todas formas que aburrida sería la vida sin que alguna vez, por algo, o por alguien, el corazón se sienta apretujado y en algún momento se nos quiebre la voz. Al mal tiempo vuestro, y al mío, no le va mal una romántica sinfonía, aunque sea de soledades. Pero sonoras.

La Hora 2002 - Quito - Ecuador